Alabado Sea Al-lah, Señor del Universo. Doy testimonio que nada ni nadie merece ser adorado sino Al-lah, y que Muhammad, sallallaahu ‘alayhi wa sallam, es Su siervo y mensajero.
Su esposo tiene la obligación de ser justo con las dos. El hecho que esté en otro país o que tema que su primera esposa sepa sobre usted, no es una razón válida para tratarla injustamente.
Por lo tanto, le aconsejamos discutir este asunto con él calmadamente. Si corrige su actitud y es justo con ambas, entonces habrá hecho lo correcto. Pero si no lo hace, entonces usted tiene derecho a pedir el divorcio y llevar el asunto a los tribunales islámicos o a las personas que los representan.
De todas formas, no debe apresurarse en pedir el divorcio, hasta que haga un balance real entre el beneficio de seguir con él o divorciarse.
Y Al-lah sabe mejor.