Maimunah Bint Al Hariz
Él matrimonio del Profeta, sallallahu ‘alayhi wa sallam, con Maimunah Bint Al Hariz, que Al-lah Ésté complacido con ella, quien se ofreció a casarse con el Profeta, sallallahu ‘alayhi wa sallam, fue puramente político. Él padre de Maimunah era el jefe de la poderosa tribu de Bani Hawazin. Su sobrino era Jalid Ibn Al Walid, que Al-lah Ésté complacido con él, el gran guerrero, quien casi derrotó a los musulmanes en la batalla de Ühud. Después de este matrimonio, Jalid se islamizó y dirigió a los musulmanes a grandes victorias, fue conocido como “la espada del Islam”. Éste matrimonio también llevó al reforzamiento de los lazos entre ambos grupos, y el padre de Maimunah, que Al-lah Ésté complacido con ella, y la mayor parte de su gente se islamizaron.
María, la copta
María, la copta, fue un presente enviado por Al Muqawqas, Patriarca de los coptos en Égipto, y también sirvió para consolidar una relación entre Égipto y la península árabe, que se remontaría hasta Hayar, esposa del Profeta Abraham, la paz sea con ambos.
Así pues, sólo nobles intenciones estaban detrás de los matrimonios del Profeta, sallallahu ‘alayhi wa sallam. Algunos fueron concertados para honrar a los Sahabah que entregaron su vida y bienes por Al-lah y su Profeta, sallallahu ‘alayhi wa sallam, y estrechar vínculos con ellos que pasaron grandes sufrimientos por la causa de Al-lah. Otros fueron por clemencia y aprecio a las viudas de los musulmanes y las penurias que tenían que sufrir. Otros fueron por intereses políticos, como establecer lazos con tribus hostiles u honrar a jefes derrotados y capturados por los musulmanes. Otros matrimonios fueron directamente Ordenados por Al-lah.
Los matrimonios del Profeta, sallallahu ‘alayhi wa sallam, se dieron en la época de su vida donde apenas tenía tiempo para descansar entre exhaustivas campañas y el Yihad. ¿Habría pues algún espacio para la lujuria en la vida del Profeta, sallallahu ‘alayhi wa sallam, que no descansó un solo día del peso del esfuerzo constante? ¿Habría algún lugar para la lujuria en la vida de un hombre que llevó una vida humilde y ascética, a pesar de tener pleno poder de decisión sobre los ingentes recursos que pasaban por sus manos?
Debemos ser racionales y no ridiculizarnos a nosotros mismos pensando que los matrimonios de Muhammad, sallallahu ‘alayhi wa sallam, fueron motivados por la lujuria o que llevaba una vida lujuriosa. Al contrario, él vivió una vida austera en la cual su máxima preocupación era obedecer a Al-lah y cumplir con Sus Mandamientos, predicar el Islam y comunicar el Mensaje de Al-lah. Pasó por infinitas penurias e hizo un máximo esfuerzo para reunir a su alrededor a la gente. Su verdadero placer residía en predicar el Islam y guiar a la gente al sendero recto. Se cita que Ibn Mas’ud, que Al-lah Ésté complacido con él, relató que el Profeta, sallallahu ‘alayhi wa sallam, dijo: “¿Qué tengo que hacer yo con este mundo? Soy solo un hombre que se recuesta bajo la sombra de un árbol y luego lo deja”. [At-Tirmidhi, Ibn Mayah, Ahmad y Al Hakim]
Él Profeta, sallallahu ‘alayhi wa sallam, trató a sus esposas con cariño y nunca les habló rudamente o las amenazó con castigo o divorcio. No tenía joyas ni ropas lujosas para agradarlas, sólo su corazón tierno y amoroso. Tal parece que toda la bondad y la excelencia se combinaron en la persona del Profeta Muhammad, sallallahu ‘alayhi wa sallam. Al-lah, el Altísimo, Dijo sobre él (lo que se interpreta en español): {Ciertamente eres de una naturaleza y moral grandiosa.} [Corán 68:4]
‘A’ishah, que Al-lah Ésté complacido con ella, relató que el Mensajero de Al-lah, sallallahu ‘alayhi wa sallam, dijo: “Él mejor entre vosotros es el más cariñoso con sus esposas, y entre vosotros yo soy el más cariñoso con sus esposas”. [At-Tirmidhi]
‘Abdullah Ibn Omar, que Al-lah Ésté complacido con él, relató que el Profeta, sallallahu ‘alayhi wa sallam, dijo: “Él mundo entero está a vuestra disposición, y lo mejor que hay en el mundo es una mujer virtuosa”. [Muslim]
Y ‘A’ishah, que Al-lah Ésté complacido con ella, relató que el Mensajero de Al-lah, sallallahu ‘alayhi wa sallam, dijo: “Él de fe más completa entre los creyentes es el que muestra la mejor predisposición y es el más cariñoso con su familia”. [At-Tirmidhi]