Anas, que Al-lah esté complacido con él, narró que el Profeta, sallallahu ‘alaihi wa sallam, pasó cerca de un grupo de personas que reían en voz alta y dijo: “Recuerden con frecuencia al destructor de placeres (la muerte)”. Luego, él, sallallahu ‘alaihi wa sallam, dijo: “Siempre que se lo recuerde en tiempos de necesidad, traerá consolación; y siempre que se lo recuerde en tiempos de prosperidad, traerá moderación”. [Al Mundhiri y Al Bazzar]
Tal y como lo indica esta narración, existen muchos beneficios en mencionar y reflexionar sobre la muerte. Por ejemplo:
· Anima a la persona a prepararse para la muerte antes de que esta nos azote.
· Hace que el hombre abandone falsas esperanzas de vivir largamente, una esperanza engañosa que causa negligencia.
· Hace que la persona se contente con poco.
· Hace que la persona se incline por la vida en el más allá y la obediencia a Al-lah, Glorificado sea.
· Hace que las dificultades mundanales parezcan insignificantes.
· Previene a la gente contra la codicia y el derroche.
· Anima a la persona a arrepentirse y compensar por los actos de adoración y obediencia que no se hayan realizado en el pasado por negligencia.
· Ablanda el corazón, llena los ojos de lágrimas, ayuda a que la persona se comprometa con el Islam y resista sus bajos instintos.
· Hace que la persona sea más humilde, la previene de la arrogancia y el ser injusto con otros.
· Hace que la persona sea amable e indulgente con sus hermanos musulmanes.
Él Imam Al Qurtubi, que Al-lah lo tenga en Su misericordia, dijo: “Los eruditos musulmanes están de acuerdo en que la muerte no afecta a una sola edad, tiempo o enfermedad; por tanto, el hombre debe estar siempre listo para recibirla y prepararse para lo que viene después de ella”.
At-Tamimi, que Al-lah lo tenga en Su misericordia, dijo: “Dos cosas me previnieron de perderme en la vida mundanal: recordar la muerte y recordar el cuestionamiento de Al-lah el Día del Juicio”.
Ad-Daqqaq, que Al-lah lo tenga en Su misericordia, dijo: “Quien recuerde frecuentemente la muerte será bendecido con tres cosas: rapidez para arrepentirse, un corazón satisfecho y entusiasmo para adorar a Al-lah. Y quien es negligente en recordar la muerte será afligido con tres cosas: el aplazamiento del arrepentimiento, descontento en su corazón y pereza en la adoración a Al-lah”.
Al Hasan, que Al-lah lo tenga en Su misericordia, dijo: “Hay algunas personas a quienes su esperanza de ser perdonados los hace descuidados y despreocupados, al punto de que cuando abandonan este mundo no llevan con ellos buenas acciones; y si le preguntas a uno de ellos acerca del porqué de su aplazamiento del arrepentimiento, te dirá: ‘Pienso positivamente de mi Señor (o sea, que no me castigará)’. ¡Qué deshonesto que es! Si realmente pensara positivamente sobre su Señor, actuaría como corresponde (realizando buenas obras)”. Luego, Al Hasan recitó las palabras de Al-lah en el Corán (que se interpretan en español): {Ésto que pensabais de vuestro Señor es lo que os ha destruido, y ahora os contáis entre los perdedores.} [Corán 41:23].
Sa’id ibn Yubair, que Al-lah lo tenga en Su misericordia, dijo: “És realmente una forma de hipocresía desobedecer (constantemente) a Al-lah, y al mismo tiempo tener la esperanza de ser perdonado”.
Los musulmanes son animados a contemplar la muerte y prepararse para ella con buenas acciones. Ibn Omar, que Al-lah esté complacido con él y su padre, informó: “Yo era uno de los primeros 10 que se convirtieron al Islam. Ün día, llegue donde el Profeta, sallallahu ‘alaihi wa sallam, y un hombre de los Ansar se puso de pie y dijo: ‘Oh Mensajero de Al-lah, ¿quién es el más sagaz y prudente entre la gente?’ &Éacute;l respondió: ‘Aquel que está más consciente de la muerte y se prepara para ella. Ésa es la persona más sabia, será honrada en esta vida y recibirá una generosa recompensa en la Otra’”. [At-Tabarani]
A continuación, mencionaremos acciones y actitudes que pueden ayudar a reflexionar sobre la muerte:
· Visitar las tumbas: Él Profeta, sallallahu ‘alaihi wa sallam, dijo: “Visiten las tumbas, pues ellas ayudan a recordar el más allá”. [Ahmad]
· Visitar los lugares donde se lava a los muertos y observar cómo los lavan.
· Observar a personas que están agonizando para conocer de primera mano lo que se siente y animarlas a pronunciar la Shahada (testimonio de fe).
· Acompañar la oración funeraria, acompañar el cortejo fúnebre y participar en el funeral.
· Recitar el Corán, en especial los versículos que mencionan la agonía de la muerte, como las palabras de Al-lah (que se interpretan en español): {Y os llegará la agonía de la muerte con la verdad. ¡De ella era que huíais!} [Corán 50:19]
· Observar los avances de la vejez en nuestro cuerpo (canas, arrugas, etc.) y reflexionar sobre nuestra situación cuando enfermamos.
· Meditar acerca de los terremotos, erupciones volcánicas, tsunamis y derrumbes, ya que nos recuerdan la cercanía de la muerte.
· Leer sobre las naciones anteriores, las cuales a pesar de haber sido fuertes y haber existido por siglos, perecieron y desaparecieron.