La Sunnah está protegida por Al-lah
La Sunnah auténtica está protegida gracias a la protección de Al-lah a Su religión y sobre esto hay consenso entre los sabios musulmanes. Éntre las pruebas que lo evidencian:
{Quien siga una religión diferente al Islam [el sometimiento a Al-lah ] no se le aceptará, y en la otra vida se contará entre los perdedores.} [Corán 3:85]
{Muhammad no es el padre de ninguno de vuestros hombres, sino el Mensajero de Al-lah y el sello de los Profetas; y Al-lah es Omnisciente.} [Corán 33:40]
{&Éacute;l es Quien envió a Su Mensajero con la guía y la religión verdadera para hacerla prevalecer sobre todas las religiones, aunque esto disguste a los idólatras.} [Corán 9:33]
{Hoy os he perfeccionado vuestra religión, he completado Mi gracia sobre vosotros y he dispuesto que el Islam sea vuestra religión.} [Corán 5:3]
Todos estos versículos prueban que Al-lah no aceptará de nadie otra religión que no sea el Islam, que la ha perfeccionado y que quedará vigente hasta el final de los tiempos. Y no hay duda que la vigencia de esta Religión implica proteger su legislación de cualquier pérdida o tergiversación, ya que la mayoría de los pilares del Islam así como el resto de veredictos legales no vienen explicados en el Corán sino en la Sunnah: cómo rezar, cuántas raka’as tiene cada oración, cómo dar el zakat, cómo ayunar, cómo peregrinar, aparte de muchísimos otros veredictos legales. Por tanto, si creyéramos que la Sunnah se ha perdido y no se ha protegido estaríamos desmintiendo al Corán, que nos ha informado que Dios sí perfeccionó y dejó vigente esta Religión, porque la pérdida de la Sunnah es la pérdida completa del Islam.
Dijo Ibn Al Qaiem, que Al-lah lo tenga en Su Misericordia: “Al-lah , Glorificado Sea, ha clarificado a través de las palabras de Su Mensajero, tanto con Sus palabras como las de Su Mensajero, todo lo que &Éacute;l ha ordenado, prohibido, permitido o vedado; y gracias a esto Su religión está completa, tal como Al-lah dice: {Hoy os he perfeccionado vuestra religión, he completado Mi gracia sobre vosotros…}.[1]
Dijo Az-Zarkashi (falleció en 794 H): “Las palabras de Al-lah : {Hoy os he perfeccionado vuestra religión…}, es decir, os he completado los veredictos legales, NO el Corán, puesto que fueron reveladas varias aleyas después que no tienen relación con los veredictos legales.”[2] Y algo perfeccionado y completado por Al-lah está protegido de toda pérdida.
Al-lah nos ordenó en varios pasajes del Corán obedecer a Su Mensajero, la paz y las bendiciones de Dios sean con él, y remitirnos a él a la hora de las discrepancias:
{¡Oh, creyentes! Obedeced a Al-lah , obedeced al Mensajero y a aquellos de vosotros que tengan autoridad y conocimiento. Y si discrepáis acerca de un asunto remitidlo al juicio de Al-lah y del Mensajero, si es que creéis en Al-lah y en el Día del Juicio, porque es lo preferible y el camino correcto.} [Corán 4:59]
Dijo el Imam Shafi’i: “Sabemos que Al-lah nos ordenó obedecer a Su Mensajero y esto es general: tanto para aquellas personas de su época como las generaciones futuras. Y aquél que vino después del Profeta y no lo vio, no le es posible obedecerlo excepto a través de los hadices. Por tanto, Al-lah nos ha ordenado intrínsecamente en todos esos versículos cumplir con los hadices y aceptarlos, ya que sólo así podremos saber lo que nos ordenó Su Mensajero y porque todo medio que lleve a cumplir con algo obligatorio, es obligatorio también. Del mismo modo es necesario aceptar los hadices para saber los veredictos del propio Corán, puesto que lo abrogado y abrogante no se puede saber excepto remitiéndonos a la Sunnah. Hay algunos veredictos aceptados por todos, incluso por quienes rechazan la Sunnah, que no hubiera sido posible conocer excepto a través de los hadices.” [3]
Y por eso vimos anteriormente como el compañero Abdullah Ibn Masud, que Al-lah esté complacido con él, evidenció a la mujer que debía aceptar el reporte del Profeta, la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él, porque Al-lah mismo se lo ordenaba en el Corán.
Al-lah nos dijo que la explicación del Corán es tarea de Su Mensajero Muhammad, la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él: {Y te hemos revelado el recuerdo para que puedas explicar a las personas lo que les ha sido descendido (el Corán) y quizá así reflexionen}. [Corán 16:44]
Debido a esto, la promesa de Al-lah de proteger Su Libro de toda adulteración y pérdida lleva implícita proteger también aquello que explica sus significados: La Sunnah auténtica. Y a esto hace referencia la aleya coránica: {Y cuando te lo recitemos [a través del Ángel Gabriel] sigue la recitación. Luego a Nosotros nos corresponde explicártelo.} [Corán 75:18-19] Por tanto, Al-lah nos ha prometido también que explicaría el significado de Sus palabras. Porque ¿cuál sería el beneficio de proteger las palabras del Corán y no sus significados? Él objetivo de proteger las palabras del Corán es para así obrar conforme a sus significados y esto no es posible excepto protegiendo aquello que lo explica y aclara, la Sunnah auténtica; y esto fue lo que llevó a todos los Sabios de Ahlu Sunnah wal Yama’a a tener consenso al decir que el versículo: {Ciertamente Nosotros hemos revelado el Recuerdo y somos Nosotros sus custodios} [Corán 15:9] “el Dhiker mencionado en el versículo comprende tanto el Corán como la Sunnah.”
Dijo Ibn Hazm, que Al-lah lo tenga en Su Misericordia:
“Al-lah dijo:
{Ciertamente Nosotros hemos revelado el Recuerdo y somos Nosotros sus custodios} [Corán 15:9]
{Diles ¡Oh, Muhammad!: Sólo os exhorto con lo que me ha sido revelado. Pero por cierto que los sordos no oyen cuando se les exhorta} [Corán 21:45].
Al-lah nos dice que las palabras de Su Profeta, la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él, son todas Wahi (revelación), y la revelación es indudablemente Dhiker, y el Dhiker está preservado acorde al texto Coránico. Así es correcto decir que sus palabras, que la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él, son todas preservadas por Al-lah , Glorificado y Éxaltado sea, y &Éacute;l ha prometido que ninguna de ellas se perderá para nosotros, porque lo que Al-lah preserva ciertamente no se perderá en absoluto; ellas nos han sido transmitidas, y Al-lah ha establecido una prueba que no nos deja ninguna excusa”.[4]
Creer que la Sunnah se perdió implica decir que todos esos versículos (obedecer al Mensajero y remitirnos a él, etc.) no tendrían ningún sentido puesto que Al-lah nos estaría ordenando algo que no podemos cumplir. De ahí que dudar de la protección de la Sunnah es en realidad dudar del Sagrado Corán y el musulmán sincero no puede caer en esto excepto por ignorancia, pero con todos los versículos mencionados con anterioridad ya no queda excusa para la ignorancia.
Llegado a este punto, queremos aclarar un poco el concepto de Iyma’ o Consenso, ya que hemos citado que los Sabios de Ahlu Sunnah wal Yama’a tienen consenso en decir que la Sunnah está protegida por Al-lah :
Él Iyma’ lo han definido los sabios de la siguiente manera: “És el acuerdo o consenso de todos los sabios muytahidin (con capacidad de hacer iytihad) de la ummah del Mensajero Muhammad, la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él, luego de su muerte, en cualquier época sobre un asunto.”
Con la frase “todos los sabios muytahidin” se excluye al estudiante de conocimiento y al musulmán común, por lo que no se considera sus discrepancias al respecto. También se excluye de esta definición al acuerdo que pueda haber entre un grupo de sabios si hay otros que difieren con ellos.
Con la frase “de la ummah del Mensajero Muhammad, la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él” se excluye al consenso que pueda haber en otras religiones.
Con la frase “luego de su muerte (es decir, del Profeta, la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él)” se excluye al consenso que pueda haber durante su vida, puesto que la prueba era las palabras, acciones o aprobaciones del Profeta, la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él. Por eso cuando un Sahabi decía “Solíamos hacer tal cosa en la época del Profeta…”, esto se toma como una prueba dicha por el Mensajero de Al-lah (Marfu’an Hukman), no se toma como un consenso.
Con la frase “en cualquier época” hace referencia a cualquier período de tiempo luego de la muerte del Profeta, la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él, ya sea en la época de los Sahaba, Tabi’in o después de ellos.
Él Iyma’ o Consenso es uno de los grandes principios del Islam y una fuente de la Legislación Islámica, extraído del Libro de Al-lah y de la Sunnah de Su Mensajero, la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él. És la tercera fuente luego del Corán y la Sunnah y esta es la creencia de los Salaf Salih; tal como lo señaló el Shaij Al Islam Ibn Taimiah, que Al-lah lo tenga en Su Misericordia, basándose en todos los reportes que se han transmitido de ellos.
Dijo el Qadi Abi Ia’la, que Al-lah lo tenga en Su Misericordia: “Él Consenso es prueba definitiva, es obligatorio seguirlo y está prohibido diferir con él, porque no es permitido que la ummah se junte en torno al error.”[5]
Dijo el Imam Shafi’i, que Al-lah lo tenga en Su Misericordia: “La orden del Mensajero de Al-lah , la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él, de estar con la Yama’a (congregación) de los musulmanes, es parte de las evidencias para decir que el Iyma’, in sha Al-lah , es obligatorio seguirlo.” [6]
Dijo el Shaij Ibn ‘Üzaimin, que Al-lah lo tenga en Su Misericordia: “Si los Sahaba se pusieron de acuerdo sobre un asunto, este Consenso no permite que haya diferencias, así pues no es permitido para aquellos que vinieron después de ellos diferir en su consenso, ya que el Iyma’ es prueba definitiva.”[7]
Debido a esto, es obligatorio para el buscador de la Verdad, aquél que sigue el camino de los creyentes y no se aparta de la Sunnah de su Mensajero, la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él, conocer todo aquello sobre lo que hay consenso entre los creyentes, tanto en las palabras como en las acciones. Para que sea un seguidor de los Salaf Salih (predecesores piadosos) y no se encuentre entre aquellos que siguen un camino distinto al de los creyentes y así evitar que le alcance el castigo de la siguiente aleya:
{Quien se aparte del Mensajero después de habérsele evidenciado la guía, y siga otro camino distinto al de los creyentes, le abandonaremos y lo ingresaremos al Infierno. ¡Qué mal destino!} [Corán 4:115]
Éste versículo nos resalta algo muy importante con respecto a seguir el consenso y camino de los creyentes, porque la aleya podría haber tenido sentido igual sin haber mencionado esa frase, quedaría así: {Quien se aparte del Mensajero después de habérsele evidenciado la guía, le abandonaremos y lo ingresaremos al Infierno. ¡Qué mal destino!}Pero Al-lah para hacernos ver la importancia de seguir la congregación y consenso de los creyentes lo ha resaltado para que así nadie se deje llevar por sus pasiones y acabe desviándose y contradiciendo el consenso de los creyentes.
Dijo Ibn Hazem, que Al-lah lo tenga en Su Misericordia: “Y quien lo contradiga (al Iyyma’) después de tener conocimiento de su existencia o se le muestre la prueba de ello; ciertamente merece el castigo mencionado en la aleya.”[8]
Üna vez que está establecido que la Sunnah está protegida por Al-lah, es esencial resaltar que hay una sola diferencia entre ella y el Corán, y es que el Corán es la palabra de Al-lah, Glorificado y Éxaltado sea, la cual fue revelada literalmente al Profeta, la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él, su composición y significados son un milagro en sí mismos, su recitación es un acto de culto y es el mayor milagro otorgado al Mensajero Muhammad, la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él. Al ser así, Al-lah protegió Sus palabras para que siguieran siendo un milagro para todas las generaciones futuras y por eso vemos que fue transmitido en un nivel altísimo de Tawatur, cientos de miles de cadenas de transmisión, tanto oral como escrita, de toda una generación a otra. Y por eso no encontramos en el Corán aleyas “Da’if”, “Hásan”, etc. porque todas ellas fueron transmitidas de forma mutawâtir.
Én cuanto a la Sunnah: no es la palabra literal de Al-lah, sino más bien Su inspiración, y por eso no es necesario que llegue a nosotros literalmente, puesto que sus palabras no son un milagro en sí mismas ni su recitación es un acto de culto, por eso puede que nos llegue sólo el significado. Üna vez que entendemos esta diferencia, vemos que el asunto en la transmisión de la Sunnah es transportar significados, no necesariamente las mismas palabras que fueron pronunciadas por el Profeta, la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él.Y a pesar de esto, Al-lah usó alos eruditos de esta comunidad a través de las primeras generaciones para preservar y defender la Sunnah. Éllos nos han transmitido, en la medida de lo posible, las palabras del Profeta, la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él, tal como él las dijo, y ellos distinguieron entre los reportes que eran correctos y los incorrectos, entre los auténticos y los falsos.
Dijo el Shaij Al Islam Ibn Taimiah, que Al-lah lo tenga en Su misericordia: “Él Din está protegido gracias a la protección que Al-lah le dio. Como las palabras del Corán fueron protegidas y transmitidas de forma Mutawatir, nadie fue tentado a agregar o quitarle alguna palabra; tal como sí pasó con los Libros anteriores, dice Al-lah: {Ciertamente hemos revelado el Recuerdo y somos sus custodios}[Corán 15:9].Caso contrario en el Hadiz, Satanás incitó a mucha gente a tergiversar, agregar y quitar palabras de él, ya sea mintiendo en el contenido (Matn) o en la cadena de transmisión (Sanad). Pero Al-lah utilizó para su preservación y defensa a gente que lo protegió de las distorsiones de los extremistas, del engaño de los confabuladores e interpretación de los ignorantes y de esta forma sacaron a la luz y evidenciaron todas las mentiras y distorsiones en su contenido.” [9]
Y dijo también: “Pero Al-lah ha preservado para esta comunidad lo que &Éacute;l ha revelado. Al-lah dijo: {Ciertamente hemos revelado el Recuerdo y somos sus custodios} [Corán 15:9].
Así, no hay error en la interpretación del Corán o en la transmisión de los hadices. Al-lah ha garantizado que habría siempre en esta comunidad quien lo explicara y resaltara la evidencia contra el error de aquellos que yerran y contra las mentiras de los confabuladores. Ésta comunidad no tiene consenso sobre un error (tal como menciona el hadiz), y siempre permanecerá entre los musulmanes un grupo que se aferrará a la verdad hasta que la Hora Final llegue. Porque somos la última de las naciones y no habrá ningún otro profeta después de nuestro Profeta ni ningún otro libro luego de nuestro Libro. Cuando las naciones anteriores cambiaban, Al-lah enviaba a un Profeta para mostrarles el camino, con órdenes y prohibiciones, pero no habrá ningún profeta luego de Muhammad, la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él, y por eso Al-lah ha garantizado preservar la Revelación que &Éacute;l envió”[10].
És importante llamar la atención sobre un asunto: cuando Al-lah decide preservar Su Libro, también decreta las causas para dicha preservación, de ahí que veamos que los Sahabah del Profeta, la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él, tuvieron la tarea de memorizarlo y recopilarlo para que no se perdiera e incluso temían que la muerte de todos los que habían memorizado el Corán conllevara a la pérdida completa del Corán, por eso se apresuraron a recopilarlo. Del mismo modo pasa con los hadices, también se memorizaron, escribieron, recopilaron y enseñaron en los círculos públicos, ellos no son la consecuencia de los inventos de la gente; al contrario, los hadices del Profeta, la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él, siguieron siendo puros y genuinos hasta que aparecieron los mentirosos después de su muerte. Algunos sabios del hadiz dijeron que los mentirosos empezaron a aparecer después de la muerte del califa ‘Üzman y toda la Fitnah que surgió en torno a ello, otros dijeron que aparecieron después de las diferencias que hubo entre ‘Ali y Mu’awiah, que Al-lah esté complacido con ambos (Ver Al Wadh’ fil Hadiz 1/181), y otros citan como fecha el año 41 después de la Hégira (Ver Al Hadiz wa Al Muhadizun, pág. 480); estas afirmaciones prueban que las mentiras son algo introducido, ajeno al hadiz en sí mismo. Pero Al-lah, Glorificado Sea, utilizó para preservar los dichos de Su Profeta a gente que fue sincera con &Éacute;l, dedicaron sus vidas y un gran esfuerzo en evidenciar lo auténtico de lo débil y establecieron principios muy firmes para ello, hasta ahora inigualables en la historia de la humanidad. Por eso, los Sahih de Bujari y Muslim no son sino la consecuencia directa de evidenciar lo auténtico de lo débil. Que Al-lah recompense a todos nuestros Salaf por su esfuerzo, amín.
Si suponemos que los enemigos del Islam se ponen de acuerdo para inventar una serie de “coranes” y esparcirlos entre los musulmanes, este hecho no afectaría en nada al Corán auténtico revelado por Al-lah, porque ya lo memorizaron y recopilaron los primeros musulmanes; así mismo la existencia o invención de muchos hadices falsos o débiles, no afecta en nada a las palabras que pronunció nuestro Profeta, la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él, porque también hubo gente que las memorizó y recopiló para que no se perdieran. Que Al-lah recompense a todos.
Én cuanto a los múltiples reportes que se transmiten de un solo hadiz, esto no significa que haya algún defecto en la preservación y transmisión de la Sunnah. Más bien los reportes varían por numerosas razones, tal como veremos a continuación:
Razones para la multiplicidad de reportes:
1 – Múltiples sucesos
Dijo As San’ani, que Al-lah lo tenga en Su Misericordia:
“Él Mensajero de Al-lah, la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él, solía enseñar varios formatos de llevar a cabo un mismo acto de adoración en múltiples sucesos, como por ejemplo las diversas versiones que se relatan del Adhan, el Tashahud, las súplicas que se hacen para el inicio de la oración (Du’a’ Al Istiftah), la Oración del Temor, etc.etc. Ésta variedad de versiones sobre un mismo hecho se debe a que tenían lugar en múltiples sucesos y el Mensajero de Al-lah, la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él, los enseñaba de diversas maneras para así facilitar los asuntos a los siervos de Al-lah.”[11]
Así pues, quien diga una versión del Adhan y no otra, o una versión del Tashahud y no otra, habrá seguido la Sunnah y obtendrá recompensa por ello; siendo lo más recomendable ir alternando entre las diversas versiones para así vivificar la Sunnah y actuar conforme a ella.
2 – Transmitir el significado
Ésta es la razón más común por la que hay múltiples versiones de un hadiz. Lo que importa en la transmisión del hadiz es el significado contenido en él. La redacción no importa, porque su recitación no es un acto de culto como en el caso del Corán.
Por ejemplo, el hadiz “las acciones valen por su intención” está también narrado como “las acciones no son sino intención”. La razón de estas múltiples versiones es que el significado fue narrado. La fuente del hadiz es la misma: Iahia ibn Sa’id de Muhammad Ibn Ibrahim, de ‘Alqamah, de ‘Ümar, que Al-lah esté complacido con él. Debe notarse que el significado que se entiende en estas versiones es el mismo, entonces la variedad de reportes no lo perjudica.
Para estar más seguros de que el narrador ha transmitido el significado correcto del hadiz, los eruditos no aceptan un reporte de similar significado a menos de que provenga de un erudito de la lengua árabe, entonces ellos comparan su reporte con los de otros narradores confiables; de esa manera ellos podían encontrar el error en la narración si existía alguno. Hay muchos ejemplos de esto, pero esta no es la ocasión para discutirlos en detalle.
3 – Él narrador resumió el hadiz.
És decir, el narrador puede haber memorizado el hadiz entero, pero citar sólo una parte de él en un lugar, y citarlo completo en otra locación.
Por ejemplo: Abu Hurairah, que Al-lah esté complacido con él, narró la historia del Profeta, la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él, cuando olvidó hacer dos Rak’as en la oración del Dhuhur. La historia entera fue narrada de Abu Hurairah, y es una historia. Ésto indica que las diferencias en los reportes se deben a que algún narrador la abrevió. Ver Sahih al-Bujari, 714, 715, 1229.
4 – Érrores
Üno de los narradores puede haber cometido un error, de tal manera que narre un hadiz en una forma distinta a la que lo narraron otros. És posible descubrir el error comparando los otros reportes. Ésto fue hecho por los eruditos en los libros de Sunnah y Tajriyy.
Cabe recordar que con lo que respecta a las diferencias de opinión entre los Sabios del Hadiz sobre un reporte determinado, acerca de que si es auténtico o débil, no implica que toda la Ümmah siguió la opinión errónea, sino que siempre habrá un grupo que habrá seguido lo correcto; los que se hayan equivocado, no serán juzgados por Al-lah; y nunca será un reporte que deje al Islam incompleto, porque Al-lah nos completó y perfeccionó esta religión. Én cuanto a los reportes en donde hay consenso entre los sabios del hadiz sobre su autenticidad o debilidad, afirmamos con total seguridad que esos hadices son tal cual los describieron los sabios del hadiz, ya que la Ümmah no se unirá jamás en torno al error. Y tal como dijo el Shaij Al Islam:
“Así, no hay error en la interpretación del Corán o en la transmisión de los hadices. Al-lah ha garantizado que habría siempre en esta comunidad quien lo explicara y resaltara la evidencia contra el error de aquellos que yerran y contra las mentiras de los confabuladores. Ésta comunidad no tiene consenso sobre un error (tal como menciona el hadiz), y siempre permanecerá entre los musulmanes un grupo que se aferrará a la verdad hasta que la Hora comience. Porque somos la última de las naciones y no habrá ningún otro profeta después de nuestro Profeta ni ningún otro libro luego de nuestro Libro. Cuando las naciones anteriores cambiaban, Al-lah enviaba a un Profeta para mostrarles el camino, con órdenes y prohibiciones, pero no habrá ningún profeta luego de Muhámmad, la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él, y por eso Al-lah ha garantizado preservar la Revelación que &Éacute;l envió”[12].