Üno de los textos proféticos cuyo significado aparente y literal generan controversia, por lo que se hace necesario ver más allá y reflexionar sobre su significado y propósito real, es el hadiz registrado por Abu Dawud, Ibn Hibban y otros, en el que Abu Sa’id Al Judrí, que Al-lah esté complacido con él, reportó que el Mensajero de Al-lah, la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él, dijo: “No seas amigo más que de un creyente y que no como de tu comida más que una persona piadosa” (Al Alabani dijo que era Hasan).
Revisión del punto de discusión
Primero, este texto no prohíbe que se hagan obras de caridad a personas que no sean piadosas, pues el Profeta, la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él, alimentó a los politeístas y les dio cientos de camellos para ganarse sus corazones. Sin embargo, los comentaristas del hadiz explican que lo que se prohíbe es frecuentarlos, porque hacerlo podría provocar que los actos de estas personas sean aprobados y difundidos entre la demás gente. Por lo tanto, no se trata de una prohibición de hacer algo que otros dichos proféticos llaman a hacer de forma particular y general, hasta con los mismos animales.
Segundo, el problema que encontraron los comentaristas del hadiz cuando compararon este texto con la aleya: {Y, a pesar del amor que tienen por sus bienes materiales, alimentan al pobre, al huérfano y al prisionero} [Corán 76:8]. Los prisioneros de guerra no son musulmanes, sin embargo, en la aleya se menciona que le daban alimento, y sabemos que negarse a creer es peor que no ser una persona piadosa. A lo que se refiere el hadiz es a que no se tenga cerca a gente inmoral, pero cuando alguien así tenga necesidad, no se le debe negar un plato de comida. Todo lo anterior se basa en lo que Al Jattabi mencionó.
Otro problema al que se enfrentan los comentaristas es que al aplicar el sentido literal y aparente del hadiz, y al entender el término “piadoso” como la persona que rechaza el pecado y todo lo que le genere confusión en su creencia, se estaría generando una gran división en la sociedad, en la que solo el piadoso sería aceptado y el que no lo sea sería rechazado, siendo los últimos la mayoría en realidad, y haría que las familias y comunidades musulmanas se dividieran y separaran. Pero la Shari’a establece que se debe unir a la gente y buscar persuadir a los pecadores para que se arrepientan, por medio del buen trato, la caridad y la bondad. Por este motivo algunos comentaristas del hadiz buscaron explicar este texto con base en los propósitos de la Shari’a.
At-Tibi expresó que la prohibición se refiere a la manera en que se consigue el alimento, es decir, que no sea de forma haram y que lo que se ofrezca sean alimentos halal.
De forma general se puede decir que la prohibición de frecuentar personas que no son piadosas se limita a si reunirse con ellos puede o no afectar el comportamiento y la moral, además de que si el propósito de invitarlas a la mesa es hablarles del Islam, aconsejarlas y buscar influenciarlas positivamente. Pues los principios establecidos por la Shari’a en este sentido son firmes y no puede haber contradicción con lo que el significado literal de este hadiz establece, por lo que hay que revisar y reflexionar sobre su contexto y objetivo, basados en lo que disponen los demás textos, para lograr la concordancia entre todos y así alcanzar los objetivos sublimes de la Shari’a relacionados con el consejo, la incitación para que se haga el bien y se prohíba el mal. Recordemos que el Mensajero de Al-lah dijo: “Faciliten las cosas y no las dificulten. Acerquen a la gente en vez de alejarla”.