Alabado Sea Al-lah, Señor del Universo. Doy testimonio que nada ni nadie merece ser adorado sino Al-lah, y que Muhammad, sallallaahu ‘alayhi wa sallam, es Su siervo y mensajero.
Pedirle a Al-lah que bendiga al Profeta, sallallaahu ‘alayhi wa sallam, y exalte su mención, tiene una gran virtud ante Al-lah. Dice Al-lah (lo que se interpreta en español): {Ciertamente Al-lah y Sus Ángeles bendicen al Profeta. ¡Oh, creyentes! Pedid bendiciones y paz por él.} [Corán 33:56] Más aún, el Profeta, sallallaahu ‘alayhi wa sallam, dijo: “Quien quiera que pida a Al-lah que exalte mi mención una vez, Al-lah exaltará su mención diez veces” [Muslim]
En cuanto a pedirle a Al-lah que exalte la mención del Profeta, sallallaahu ‘alayhi wa sallam, en congregación y a una sola voz, diciendo “Ya Nabi Assalaamu Alaykum'', se deben considerar varios puntos:
Sólo decir “Assalamu alaikum” al Profeta, sallallaahu ‘alayhi wa sallam, sin pedirle a Al-lah que lo bendiga. Esto es, claro está, si consideramos que hay una omisión en su declaración: el nombre de Al-lah; lo que significa que usted tiene la intención de decir: “La paz de Al-lah sea sobre ti”. Pero, decir simplemente “Assalamu alaikum”, sin pedirle a Al-lah que bendiga al Profeta, sallallaahu ‘alayhi wa sallam, contradice el verso antes mencionado, en el cual Al-lah nos ordena combinar la súplica a Al-lah para pedir que lo bendiga junto con el ‘saludo de paz’. Esto también contradice los textos auténticos referidos a suplicarle a Al-lah que bendiga al Profeta, sallallaahu ‘alayhi wa sallam. Además, los Salaf (los sabios de nuestros virtuosos predecesores), que Al-lah les dé Su perdón, nunca tuvieron esta práctica, sino que solían combinar ambas cosas: la súplica y el saludo de paz. De hecho, cuando en un principio los Compañeros recibieron la orden de suplicar a Al-lah que bendiga al Profeta, sallallaahu ‘alayhi wa sallam, ellos le pidieron al Profeta que les enseñara cómo hacerlo y él les enseñó. Se reporta que Ka'b Ibn 'Uyrah, que Al-lah le dé Su perdón, narró que un hombre le preguntó al Profeta, sallallaahu ‘alayhi wa sallam: “¡Oh Mensajero de Al-lah! Estábamos enseñando cómo se hace el Salam, pero no sabemos cómo pedirle a Al-lah que te bendiga”. Entonces, el Profeta, sallallaahu ‘alayhi wa sallam, dijo: “Digan: ‘Al-lahumma Salli 'ala Muhammad, wa'ala ali Muhammad, Kama Sallayta 'ala Ibrahim wa'ala ali Ibrahim, innaka Hamidun Mayid. Wa barik 'ala Muhammad wa'ala ali Muhammad, Kama Barakta 'ala Ibrahim wa'ala ali Ibrahim, innaka Hamidun Mayid’ (¡Oh Al-lah! Exalta a Muhammad y la familia de Muhammad, como exaltaste a Ibrahim y la familia de Ibrahim, Tú eres El Digno de Alabanza, El Gloriosos. ¡Oh Al-lah! Bendice a Muhammad y a la familia de Muhammad, como bendijiste a Ibrahim y a la familia de Ibrahim. Tú eres El Digno de Alabanza, El Glorioso)”.
Suplicar a Al-lah que bendiga al Profeta, sallallaahu ‘alayhi wa sallam, en congregación, de la forma en que usted lo describe, es una innovación y una práctica que no es reportada de ninguno de los Salaf; y, por lo tanto, no está permitida.
Si al decir “Ya nabiyu Al-lah” (Oh Profeta de Al-lah) usted intenta pedir la ayuda del Profeta, sallallaahu ‘alayhi wa sallam, entonces esto no está permitido; tal y como dijo el Profeta, sallallaahu ‘alayhi wa sallam: “No busquen mi ayuda, sino busquen la ayuda de Al-lah” [Al-Tabarani]
Y Al-lah Sabe mejor.