Las alabanzas sean para Al-lah, Señor y Creador del universo, y que Su paz y Sus bendiciones sean con el Profeta Muhammad, con todos sus familiares y todos sus discípulos.
Las normas divinas de Al-lah, el Exaltado, no tienen cabida para el favoritismo ni la adulación; Él dice:
- {¡No hallarás cambio alguno en el proceder de Al-lah!} [Corán 33:62]
- {No habrá cambios en el designio de Al-lah} [Corán 35:43]
La Shari’a islámica no distingue entre los iguales, ni trata a los desiguales como equivalentes. La destrucción (inevitable) de los confabuladores, opresores y renegados es solo cuestión de tiempo. El paso del tiempo es parte de la solución, y las premisas y normas deben permanecer inamovibles. Muhammad Ibn Ka'b Al Quradhi, que Al-lah lo tenga en Su misericordia, dijo: “Tres cualidades caracterizan a quienes las poseen:
1) La confabulación (malvada), como dice Al-lah, el Exaltado: {Y se confabularon [para apartar a la gente del camino recto], pero las confabulaciones recayeron sobre ellos mismos} [Corán 35:43].
2) Incumplimiento, como dice Al-lah, el Exaltado: {Quien no cumpla con el juramento solo se perjudicará a sí mismo} [Corán 48:10].
3) La opresión, como dice Al-lah, el Exaltado: {¡Oh, gente! Vuestra opresión recaerá sobre ustedes mismos} [Corán 10:23]”.
Causas de la destrucción:
Esas cualidades provocan la destrucción de las personas que las poseen. Evidentemente, existe una estrecha relación entre las causas y los efectos y entre las premisas y las conclusiones; tus actos son obra tuya. Al-lah, el Exaltado, dice: {Quien obre el bien lo hará en beneficio propio, pero quien obre el mal lo hará en detrimento propio. Sepan que ante su Señor será el retorno} [Corán 45:15]. También dice: {Si obran bien será en beneficio propio, pero si obran mal será en contra suya} [Corán 17:7]. En la misma línea, el Profeta, la paz y las bendiciones de Al-lah, sean con él dijo: “Hagan lo que quieran; serán recompensados o castigados en consecuencia”. También, en un relato auténtico, encontramos que el Profeta, la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él, dijo: “Al-lah, Glorificado sea, dijo: “Oh, siervos Míos, ciertamente son sus obras las que computo y luego se las recompenso. Quien encuentra bien, que alabe a Al-lah; y quien encuentre lo contrario, que no se reproche más que a sí mismo”.
Un hombre se presentó una vez ante un sabio y le dijo: “La gente de tal tribu se confabuló para perjudicarme y se unió como si fuesen una sola mano contra mí”. El sabio recitó: {La mano de Al-lah está sobre sus manos} [Corán 48:10]. El hombre siguió quejándose: “Confabulan malvados planes en mi contra”, por lo que el sabio recitó: {… pero las confabulaciones recayeron sobre ellos mismos.} [Corán 35:43]. El hombre agregó: “Son muy numerosos”, y el sabio recitó: {¡Cuántas veces, con el permiso de Al-lah, un grupo pequeño ha derrotado a grandes ejércitos!} [Corán 2:249].
Las malvadas confabulaciones de los incrédulos los destruyen:
Si quieres salvarte de los planes malvados de los incrédulos y de los perversos, confía plenamente en que su destrucción se producirá inevitablemente por sus propias confabulaciones malvadas, su opresión y su rebeldía. De hecho, se destruyen a sí mismos antes de que tu arma los alcance, y solo ellos mismos sufren las consecuencias de sus malas cualidades. Al-lah, Glorificado sea, dice: {Cuando [los conspiradores] maquinaron, Al-lah desbarató sus planes, porque Al-lah es el sumo planificador} [Corán 3:54]. También dice:{De igual manera, dispuse en cada ciudad que los peores criminales maquinaran intrigas [contra su propia gente]. Pero sin darse cuenta, lo único que logran con sus intrigas es causarse daño a sí mismos} [Corán 6:123].
Las malvadas confabulaciones se vuelven en contra de los mismos confabuladores:
El Corán nos relata una de las malvadas confabulaciones planeadas por la gente de Zamud en contra de su Profeta Salih, la paz sea con él, donde Al-lah, Glorificado sea, dice: {Ellos urdieron un plan, pero sin que se dieran cuenta, Yo tenía otro plan. Observa cómo desbarato su plan: los destruí a ellos y a todo su pueblo [que fue cómplice]} [Corán 27:50-51]. Al comentar estas aleyas, los sabios dijeron: “Significa: mientras no percibían a los ángeles que Al-lah envió para proteger a Salih de su gente cuando se aproximaron para matarlo, los ángeles lanzaron a cada uno de ellos una piedra hasta matarlos a todos, y Salih se salvó de la malvada confabulación de su pueblo”. También se dijo: “Tramaron fingiendo que se embarcaban en un viaje, cuando en realidad se escondían en una cueva para volver por la noche a matarlo. Entonces, Al-lah hizo que una roca se moviera y bloqueara la entrada de la cueva; y este fue Su plan contra ellos”.
Del mismo modo, los idólatras (de la Meca) urdieron malvadas maquinaciones contra el Profeta, la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él, como dice Al-lah, el Exaltado: {Y recuerda [¡oh, Muhammad!] cuando se confabularon contra ti los incrédulos para capturarte, matarte o expulsarte [de tu ciudad]. Ellos planearon en tu contra, pero Al-lah desbarató sus planes, porque finalmente Al-lah es el que mejor planea} [Corán 8:30]. Al-lah salvó a Su Profeta, la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él, y así pudo emigrar a salvo a Medina y luego de un tiempo mató a los líderes de los incrédulos en la batalla de Bader, incluyendo a Abu Yahl, 'Utba Ibn Rabia, y Shaiba Ibn Rabia. Después, Al-lah, Glorificado sea, concedió a los musulmanes el triunfo sobre los idólatras el día de la Conquista de La Meca. Cuando el Profeta, la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él, falleció, Al-lah le había concedido el triunfo sobre ellos, le permitió conquistarlos, y lo elevó en estatus y reputación.
Los hipócritas también tramaron contra el Profeta, la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él. Al-lah, Glorificado sea, dice: {Pero quienes se confabulen para hacer el mal tendrán un castigo severo, y sus planes fracasarán} [Corán 35:10]. Sus malvadas maquinaciones fueron finalmente desbaratadas, y sus engaños se evidenciaron para toda la gente racional y sabia. Ciertamente, a la persona que oculta algo en su interior, Al-lah lo hace evidente en sus expresiones faciales y en sus “actos fallidos”, y hace recaer sobre ella sus consecuencias, sean buenas o malas.
Los judíos de Medina también confabularon malvados planes contra el Profeta, la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él, e intentaron asesinarlo. Se confabularon uniéndose con los politeístas contra el Profeta varias veces, como es bien sabido. Como resultado, el Profeta, la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él, ejecutó a algunos de ellos y desterró a otros. Se le concedió el triunfo sobre ellos, y su mensaje se propagó a toda la gente. Cuando se acerque el Último Día, Al-lah, Exaltado sea, hará que las piedras y los árboles, excepto Al Gharqad (espino de boj), que es el arbusto de ellos, hablen a su nación (para revelar la ubicación de los judíos que apoyan al Anticristo que se escondan detrás de ellos), diciendo: “¡Oh, musulmán! ¡Oh, siervo de Al-lah! Hay un judío detrás de mí, ¡ven y mátalo!”; y Al-lah, Glorificado sea, también permitirá a los musulmanes conquistar Jerusalén.
Por lo tanto, ten cuidado de las malvadas confabulaciones y no te dejes deslumbrar por los confabuladores. Qais Ibn Sa'd Ibn 'Ubada, que Al-lah esté complacido con él y con su padre, dijo: “Si no hubiera escuchado al Profeta, la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él, decir: ‘Las confabulaciones y los engaños estarán en el Fuego del Infierno’, habría sido uno de los más astutos” (Al Albani lo calificó Sahih).
Significado de Makr cuando se atribuye a Al-lah, el Todopoderoso:
No es un secreto que el Makr (esquema o plan en idioma árabe) que Al-lah, Glorificado sea, se atribuye a Sí mismo, corresponde a Su Majestad y Grandeza. Indica la forma en que Él inflige el castigo a los que traman contra Sus aliados y mensajeros, contrarrestando sus malos planes con Su buen plan. Por lo tanto, mientras que sus planes son muy viles, los de Al-lah, Glorificado sea, son muy buenos, porque constituyen la justicia y la recompensa justa. Lo mismo ocurre con la mujada'a (estratagema) cuando se le atribuye a Al-lah, Exaltado sea; indica Su contraestratagema como castigo para aquellos que idean estratagemas contra Sus mensajeros y aliados. Ciertamente, no hay ningún plan ni estratagema mejor que el Suyo.
La opresión también termina mal:
Al igual que las malvadas confabulaciones tienen consecuencias adversas para quienes las realizan, la opresión también conlleva el más rápido de los castigos. Se ha dicho: “Quien oprima con su espada será asesinado por ella; un opresor tendrá inevitablemente el sabor de su propia medicina; la opresión derrota a quienes la cometen; la opresión siempre tiene un mal final; quien cava una fosa para su hermano caerá en ella; entonces evita la opresión, ya que en verdad es digna de ser evitada”. Abdul-lah Ibn 'Abbas, que Al-lah esté complacido con ambos, solía decir: “Si ocurriera que una montaña oprimiera a otra montaña, Al-lah, el Todopoderoso, arrasaría a la opresora”. También dijo: “Un rey pronunció una palabra de opresión mientras estaba sentado en su trono; Al-lah, Glorificado sea, lo transformó en otra criatura, tal vez una mosca u otra cosa. Y así fue condenado al olvido”.