Me llamo Jadiyah y vivo en Alemania, abracé el Islam hace cuatro años. Estoy casada hace cinco o seis años, y mi esposo se opone al Hiyab. Él dice que es musulmán, y que le gusta que yo rece y cambie mi personalidad, pero él no reza, ni acepta que yo vista Al Hiyab.
Además, no me permite leer libros islámicos, ni asistir a lecciones o conferencias religiosas. Más bien, le da vergüenza que yo vista Al Hiyab, y por eso, no sale conmigo.
A lo largo de los años pasados, él trató de cambiarme, y también, yo trato de cambiarlo utilizando palabras amables, pero no he notado ningún cambio positivo, pues él piensa que tiene el 100% de la razón, y que nadie puede influir en su opinión. Yo sé que quien tiene paciencia, va a triunfar, pero siento que mi fe se está debilitando.
Durante este periodo, yo estuve optimista pensando que iba a poder cambiarlo con mis esfuerzos y mi Du‘a’ por él. Sin embargo, hace cinco meses, empecé a pensar en divorciarme de él, pero no sé si mi decisión es correcta o no.
Algunos hermanos me dicen que soy pecadora por quedarme con mi esposo. ¿Qué me aconsejan?
Alabado Sea Al-lah, Señor del Universo. Doy testimonio que nada ni nadie merece ser adorado sino Al-lah, y que Muhammad, sallallahu ‘alayhi wa sallam, es Su siervo y mensajero.
Primero; le damos la bienvenida hermana a nuestra página Web, damos las alabanzas a Al-lah, Enaltecido Sea, por Guiarle al Islam, y pedimos a Al-lah, Glorificado y Enaltecido Sea, que le Dé firmeza en este camino hasta encontrarse con Él.
Respecto a la pregunta: su esposo tiene que temer a Al-lah, Enaltecido Sea, arrepentirse ante Él de lo que hace, ya que dejar la oración es un pecado grande, y muchos ulemas lo han considerado como acto de Kufr (incredulidad) mayor, y dijeron que quien deja la oración es incrédulo, porque el Profeta sallallahu ‘alayhi wa sallam, dijo: “La diferencia entre nosotros los musulmanes y los incrédulos es la oración. Quien la deja, habrá entrado en la incredulidad". Pues la oración es el pilar principal de la religión, y así; quien no la realiza pues no tiene religión.
Su esposo tendría que estar feliz al saber que usted viste Al Hiyab, y debería incitarle a asistir a lecciones y conferencias religiosas, para que aprenda lo que le pueda servir y pueda acercarse a Al-lah, Enaltecido Sea. Y no debería ser un obstáculo que le impida seguir el camino de la guía y que la desvíe del Camino de Al-lah, Enaltecido Sea, tratando de cambiarla, como mencionó usted.
Él debe temer a Al-lah, Enaltecido Sea, arrepentirse a Él, saber que va a estar de pie ante Al-lah, Enaltecido Sea, en un día que equivale a cincuenta mil años, estando descalzo y desnudo, y allí va a saber la gravedad y la consecuencia de lo que hizo.
Le aconsejamos a usted divorciarse de su esposo si él es obstinado, no quiere aceptar la verdad y insiste en dejar la oración. Porque no hay bien en vivir con un esposo que no sabe el derecho de su Señor sobre él, ni da importancia a la religión. Quizá Al-lah, Enaltecido Sea, le Recompense con un buen esposo que le ayude a seguir el camino de la guía, pues vivir con su esposo actual puede conducirle a desviarse –que Al-lah nos Libre de eso- especialmente que usted ya empezó a sentir una debilidad en su fe.
Pedimos a Al-lah, Enaltecido Sea, que le Fortalezca la fe.
Continuando con los aspectos en los cuales se evidencia el Tawhid durante la realización del Hayy, mencionaremos...
Alabado sea Al-lah Señor del universo, y que Su paz y bendiciones sean sobre Su Profeta Muhammad, sus familiares...
Dice Al-lah (lo que se interpreta en español): {Y recuerda [¡Oh, Muhammad!] cuando Establecimos a...