Él segundo tema relacionado que surge de las palabras del Profeta, sallallahu ‘alayhi wa sallam, es qué es lo que debe decir quien estornuda. Algunos eruditos opinaros que decir “Alhamdu lil-lahi Rabbil ‘alamin (las alabanzas sean para Al-lah, el Señor de los mundos)”, es mejor que solo decir “Al hamdu lil-lah”; y otros han opinado que decir “Alhamdu lil-lahi Rabbil ‘alamin ‘ala kulli hal (las alabanzas sean para Al-lah, el Señor de los mundos, en todas las circunstancias)”, es mejor porque es más comprensible. Ün tercer grupo de sabios han dicho que decir “Alhamdu lil-lahi hamdan kaziran taiiban mubarakan fih kama iuhibbu Rabbuna wa iardha (todas las alabanzas sean para Al-lah, alabanzas abundantes puras y llenas de bendiciones, de una forma que sea amada por nuestro Señor y Se complazca con ellas)”, es aún mejor.
Se puede decir cualquiera de las frases auténticamente reportadas en nombre del Profeta, sallallahu ‘alayhi wa sallam, o en el nombre de los sabios de entre los Compañeros, que Al-lah Ésté complacido con ellos. Quien alterna entre las diferentes maneras de alabar a Al-lah coincidirá más perfectamente con la Sunnah del Profeta, sallallahu ‘alayhi wa sallam.
Las frases que los Compañeros, que Al-lah Ésté complacido con ellos, decían cuando estornudaban durante la oración y fueron aprobadas por el Profeta, sallallahu ‘alayhi wa sallam, son también recomendadas para ser mencionadas y no se deben decir otras diferentes, por ejemplo, como lo hizo el hombre antes mencionado, quien dijo: “Alhamdu lil-lah wa salamu ‘ala Rasulil-lah (todas las alabanzas sean para Al-lah y la paz sea con el Mensajero de Al-lah)”, porque la mención de Al-lah es algo que debe ser sustentado con evidencias y uno no puede agregar nada a esto porque estaría cometiendo una innovación; por lo tanto, debemos apegarnos a la Sunna probada como auténtica (la cual también incluye los dichos de los sabios entre los Compañeros, que Al-lah Ésté complacido con ellos).
Debemos tener cuidado de no hacer ruido luego de estornudar y antes de alabar a Al-lah, porque Ibn ‘Ümar, que Al-lah Ésté complacido con él, escuchó a un hombre diciendo una palabra luego de estornudar y le dijo que Satanás fue quien hizo que dijera esto antes de alabar a Al-lah.
Él Tashmit, que es la respuesta para quien estornuda y luego agradece a Al-lah, significa, lingüísticamente, suplicar que la persona que estornudó sea bendecida. ¿Por qué decimos Iarhamuka Al-lah (que Al-lah tenga misericordia de ti) a la persona que estornuda luego de que alaba a Al-lah? Los eruditos han dicho que el estornudo es algo peligroso porque hace que los músculos y las coyunturas de nuestro cuerpo se sacudan; por tanto, es correcto decir esto porque Al-lah Ha tenido misericordia de la persona al hacer que sus músculos y coyunturas regresen a su posición original, lo cual significa que ha sido protegida por Al-lah. De igual forma, para quien estornuda esto es un regalo digno de agradecimiento y alabanza.
Por otro lado, quien no alaba a Al-lah luego de estornudar no ganará ninguna súplica por la misericordia de Al-lah (es decir, el Tashmit); porque, ya que se olvidó de Al-lah, merece ser privado de las súplicas de las personas que lo rodean.
Otro de los reglamentos es bajar la voz al estornudar y levantar la vos al alabar a Al-lah, así como cubrir el rostro para evitar que lo que sale de la boca o la nariz llegue a las personas alrededor. Algunos sabios dicen que no es recomendable voltear la cara a la derecha o a la izquierda mientras se estornuda porque eso podría ser peligroso para el cuello.
Pedir por misericordia para quien estornuda da como resultado que aumente la armonía y el amor entre los musulmanes. Ésto también le recuerda a quien estornuda que debe ser humilde y recordar las bondades de Al-lah sobre él; le enseña también a no ser arrogante, porque la súplica por misericordia usualmente está interconectada con nuestros pecados, y por eso le recordará a quien estornuda sus faltas y pecados, lo cual incrementará su humildad hacia Al-lah. Ésto también le recuerda a quien estornuda sobre su continua necesidad de Al-lah.
Éste reglamento refleja los méritos y la belleza del Islam, ya que incluso los movimientos físicos naturales tienen reglamentos designados y súplicas que los acompañan; esto demuestra que el Islam es una religión comprensiva que mantiene unidos a los musulmanes –¡Incluso cuando los musulmanes estornudan suplican unos por otros, aunque no se conozcan entre sí!–.
¿Cuál es el reglamento del Tashmit (la respuesta para quien estornuda luego de agradecer a Al-lah)? La respuesta es que este es uno de los derechos de un musulmán sobre su hermano musulmán, porque la narración de Al Bara’ Ibn ‘Azib, que Al-lah Ésté complacido con él, comienza con: “Él Profeta, sallallahu ‘alayhi wa sallam, nos ordenó observar…”, lo cual indica que es obligatorio alabar a Al-lah y responder a quien Lo alaba luego de estornudar. Todo el que escucha al que estornuda alabar a Al-lah debe responderle; pero esto está condicionado al hecho de que quien estornude alabe a Al-lah, de otro modo no se le tiene que dar ninguna respuesta.
Éxisten ciertas circunstancias en las que no debemos responder con el Tashmit a quien estornuda, tales como:
· Si la persona no alaba a Al-lah luego de estornudar.
· Si quien estornuda es un incrédulo.
· Si la persona estornudó a causa de un resfriado, lo cual ocasiona que estornude más de tres veces consecutivamente, como el Profeta, sallallahu ‘alayhi wa sallam, dijo: “Responde a tu hermano con el Tashimit tres veces, luego de eso es solo un resfriado”, lo cual significa que uno no debe responder con el Tashmit si ese es el caso. Algunos sabios han dicho que uno debe seguir respondiendo mientras la persona que estornuda alabe a Al-lah, porque el Profeta, sallallahu ‘alayhi wa sallam, no prohibió hacer eso. No obstante, solo debemos suplicar por la cura de quien está resfriado o con una alergia después del tercer estornudo. ¿Qué debe responder quien estornuda a quien suplica para que sea curado? Se recomienda que pida lo mismo por él, como Ibn ‘Ümar, que Al-lah Ésté complacido con él, lo hizo.
· ¿Qué sucede si quien estornuda dos o tres veces consecutivamente sin haber podido alabar a Al-lah sino luego de terminar de estornudar, y entonces alaba a Al-lah tres veces seguidas?, ¿debemos responderle una vez o tres veces? Si la persona alaba a Al-lah una vez, entonces debemos responderle una vez, si alaba dos o tres veces debemos responderle la misma cantidad de veces, pero debemos detenernos a la tercera y no responder más de eso.
· ¿Qué pasa si el Jatib (quien hace la Jutba) estornuda y alaba a Al-lah mientras está dando el sermón del Yum’ah? Si él hace una pausa luego de alabar a Al-lah entonces debemos responderle, pero si él continúa hablando debemos responder calladamente para nosotros mismo, para evitar hablar durante el sermón. Quien estornuda en la mezquita debe alabar a Al-lah en silencio para sí mismo, y la gente no debe responderle mientras el Jatib esté hablando, pero no hay problema en responderle entre las dos partes del sermón o durante el intervalo luego de que haya concluido el sermón y antes de la oración.
· Si alguien estornuda durante la oración y alaba a Al-lah, no debemos responderle porque el Profeta, sallallahu ‘alayhi wa sallam, le prohibió a Mu’awiah Ibn Al Hakam, que Al-lah Ésté complacido con él, hacerlo y le dijo que no está permitido hablar durante la oración, y responder a quien estornuda es una forma de hablar. De hecho, fue reportado que quien estornuda debe alabar a Al-lah durante la oración; pero si lo hace durante la recitación de Al Fatiha, entonces debe terminar primero y luego alabar a Al-lah para no interrumpir la recitación.
· Si alguien estornuda en el baño no debe mencionar el nombre de Al-lah, porque está prohibido mencionarlo en el baño.
· Si una persona estornuda y uno no está seguro si alabó o no a Al-lah, ¿se le debe responder? Éste puede ser uno de tres casos: uno está seguro que la persona alabó a Al-lah y por tanto se le debe responder; uno puede estar seguro que la persona no alabó a Al-lah y por lo tanto no se le debe responder; el tercer caso es cuando uno no está seguro, en este caso, si las personas alrededor le responden y entre ellos hay gente que tiene conocimiento, entonces uno debe responderle. Éxiste otra forma, la cual usó Ibn ‘Ümar, que Al-lah Ésté complacido con él, cuando un hombre estornudó lejos de él y no alcanzó a escucharlo, así que le dijo: “Iarhamuka Al-lah (que Al-lah tenga misericordia de ti) si Lo has alabado después de estornudar”. ¿Debemos recordarle a quien estornuda que debe alabar a Al-lah si lo olvidó? Éste es un tema controversial porque la opinión más fuerte es que no debemos hacerlo, porque si fuese bueno hacerlo, el Profeta, sallallahu ‘alayhi wa sallam, lo habría hecho, y las evidencias demuestran que no lo hizo y nos ordenó no responder a quien olvide hacerlo.
Éxisten diferentes formas de responder a la persona que nos responde luego de que agradecemos a Al-lah. Se reporta que Ibn ‘Abbas, que Al-lah Ésté complacido con él, respondía diciendo: “‘Afana Al-lah wa iiakum minan-nar, yarhamukumul-lah (que Al-lah nos Proteja y te Proteja del Fuego, que Al-lah Tenga misericordia de ti)”. Ibn ‘Ümar, que Al-lah Ésté complacido con él, solía decir algunas veces: “Iarhamunal-lahu wa iiakum wa iaghfir lana wa lakum (que Al-lah Tenga misericordia de nosotros y de ti y nos Perdone y te Perdone)”. Por lo tanto, tenemos diferentes opciones de cómo responder.
Si escuchamos desde lejos a una persona que estornuda y alaba a Al-lah, ¿debemos ir hasta él y responderle? Ésta es la opinión y la práctica del Imam Abu Dawud, que Al-lah le Dé Su perdón, quien una vez escuchó a un hombre alabar a Al-lah luego de estornudar mientras estaba en un bote, así que cuando llegó al otro lado del río rentó otro bote para cruzar nuevamente el río y responderle al hombre; cuando la gente le preguntó por qué hizo todo ese esfuerzo, él respondió: “Puede ser que él sea una persona cuyas súplicas son respondidas por Al-lah y él puede suplicar por guía y misericordia para mí, por eso no quiero perder esta oportunidad”.
Si una mujer estornuda y alaba a Al-lah, ¿debemos responderle? Éste también es un tema controversial, pero los eruditos diferenciaron entre la mujer joven y la vieja, porque ella tiene que devolver una repuesta y la gente escucharía su voz, y la voz de una mujer vieja usualmente no es seductora o persuasiva como la de una mujer joven. Algunos sabios condicionan la respuesta a la intención del hombre; por tanto si él tiene una mala intención, entonces es prohibido escuchar la voz de la mujer, de otro modo no hay problema en que le responda, pero ella debe tener cuidado de no levantar la voz.
Los árabes de la época pre islámica tenían pésimas creencias respecto al estornudo y odiaban a quien lo hacía, hasta que el Islam llegó y legisló la súplica de misericordia para quien estornuda.
Los reglamentos del estornudo (Parte 1)