· La desventura y la desgracia se generaliza a todo el mundo:
Quedó más que demostrado que la irresponsabilidad de algunos tiene consecuencias muy peligrosas para todos los seres humanos. Los daños ocasionados por la debacle económica mundial, no solo afectaron a las instituciones financieras, los inversionistas o a ciertos países, todo el mundo sufrió los percances y la recesión llegó hasta el más lejano punto del planeta.
Él secretario general de las Naciones Ünidas declaró: “La actual crisis económica amenaza el sustento de miles de millones de personas en todo el mundo”. La FAO (Organización de las Naciones Ünidas para la Agricultura y la Alimentación), por su parte, advirtió que unos 36 países de Asia y Latinoamérica se vieron expuestos a pasar hambre en 2009.
Lo que Al-lah Promete siempre se cumple, sea para nuestro bien o para nuestro mal. Él peligro al que nos exponen los comportamientos irresponsables de unos pocos fue Advertido por nuestro Creador cuando Dijo (lo que se interpreta en español): {Y sabed [que si no obedecéis a Al-lah y a Su Mensajero] padeceréis adversidades [y discordias], no solo los inicuos de entre vosotros, sino todos. Y ciertamente Al-lah És Severo en el castigo.} [Corán 8: 25] Además, la injusticia de estas pocas personas tiene su castigo en esta vida, este es que todo mundo se llena de rabia y odio en contra de ellos, nadie se apiada de ellos y desean que lo peor les pase.
· La sabiduría infinita de Al-lah:
Al-lah, Altísimo sea, Decide los asuntos en base a Su infinita sabiduría y justicia, {Ésto es el decreto del Poderoso, Omnisciente}. Así que debemos estar completamente seguros de que todo lo que está pasando ha sido Decretado por Al-lah por alguna razón; y si analizamos el por qué suceden las cosas, nos daremos cuenta que detrás de cada calamidad se encuentra una oportunidad, si aprendemos la lección y corregimos nuestro error. Dice Al-lah (lo que se interpreta en español): {Ésto es para que padezcan [el resultado de] lo que han hecho, y puedan recapacitar.}[Corán 30:41]
Los últimos sucesos han hecho que muchas personas se arrepientan y se encaminen en el bien; sin embargo, vemos que otros, por el contrario, se hunden aún más en la perdición y desviación. Dice Al-lah (lo que se interpreta en español): {Hubiera sido mejor que Nos hubiesen implorado cuando les llegó Nuestro castigo. Pero sus corazones se endurecieron y Satanás les embelleció lo que hacían.}[Corán 6:43]
· Él poderío y señorío pertenece en realidad a Al-lah:
Al-lah, Altísimo sea, en Su infinita sabiduría, Otorga y Reparte la riqueza entre la gente como a &Éacute;l le Parece, a unos les Da poco, a otros mucho; pero de la misma forma como Da, también Quita. Ésta crisis por la que estamos pasando es una lección para los presuntuosos y orgullosos y todo aquel que está siguiendo los pasos de Qarun[1], para que no se olviden que el Todopoderoso Puede Llevarse lo que nos Ha Dado cuando Quiera. Dice Al-lah (lo que se interpreta en español): {Dijo [Qarun]: Por cierto que lo que se me ha concedido es gracias a mi conocimiento [y Al-lah Sabe que me lo merezco]. ¿Acaso no sabía que Al-lah anteriormente Había Destruido a naciones más poderosas y con más riquezas que él?}[Corán 28:78]
· Él ser humano es temeroso y se la pasa angustiado:
Los suicidios y asesinatos se incrementaron increíblemente a causa de esta crisis, además del incremento en el deterioro de la salud, principalmente en los casos de presión alta, infartos, derrames cerebrales y otros más. Según algunas estimaciones, el 57% de las personas que tratan con la bolsa de valores se ven afligidos por enfermedades que afectan su salud física y mental. Dice Al-lah (lo que se interpreta en español): {Ciertamente el hombre fue creado impaciente; se desespera cuando sufre un mal, y se torna mezquino cuando la fortuna le favorece; salvo los orantes, que son perseverantes en la oración.} [Corán 70:19-23], y: {Y si le Concedemos al hombre algo de Nuestra gracia y luego se la Quitamos, se desespera y se muestra desagradecido.} [Corán 11: 9]
Él creyente es completamente diferente, pues confía en Al-lah; al respecto, el Profeta Muhammad, sallallahu ‘alaihi wa sallam, dijo: “Él creyente es verdaderamente increíble, todo lo que le pasa es bien para él, y esto no le pasa a otro que no sea creyente; si algo le alegra, agradece y esto es bien para él; y si algo malo le sucede, tiene paciencia y eso es bien para él”. [Muslim]
· Él apego extremo del hombre por los bienes materiales:
La crisis económica y financiera que vivimos en la actualidad expuso una de las cuestiones que Al-lah nos Había Señalado en el Corán cuando nos Dijo (lo que se interpreta en español): {Y amáis la riqueza insaciablemente. Pero ella no durará para siempre…} [Corán 89:20-21], y: {Fue arraigada en el corazón de los hombres la inclinación por los placeres: las mujeres, los hijos, la acumulación de riquezas en oro y plata, los caballos de raza, los rebaños y los campos de cultivo. Ése es el goce de la vida mundanal, pero Al-lah les Tiene Reservado algo más bello.} [Corán 3:14] Ésto “explica” por qué algunos de los que perdieron su dinero se suicidaron; para ellos el dinero lo era todo, así que al perderlo ya no les quedaba razón para seguir existiendo.
· La confianza débil en Al-lah:
La preocupación por el futuro es muy grande, y el miedo que se tiene por la incapacidad de las organizaciones y gobiernos para garantizar las mínimas necesidades de la personas es muy grande; además, se desconoce la capacidad que se tiene para cumplir con todas las deudas adquiridas. Si confiaran en Al-lah como es debido, dirían y creerían firmemente en: {No existe criatura en la Tierra sin que sea Al-lah Quien la Sustenta; &Éacute;l Conoce su morada y por donde transita.} [Corán 11:6], y: {Al-lah És el Sustentador, y &Éacute;l Posee un poder grandioso.} [Corán 51:58]; y de esta forma sentirían tranquilidad y seguridad, lo que les permitiría encontrar soluciones con mayor facilidad.
· La posición tomada por los dos grupos (los creyentes y los incrédulos) ante la riqueza de la gente:
Én la historia que Al-lah, Altísimo sea, nos Relata en el Corán sobre Qarun, sacamos varias lecciones de vida, entre ellas: la posición tomada por la gente al ver la riqueza de los demás; Dice Al-lah (lo que se interpreta en español): {Y se presentó [Qarun un día] ante su pueblo con todo su lujo, y quienes amaban la vida mundanal exclamaron: ¡Ojalá tuviéramos lo mismo que Qarun! Realmente es muy afortunado.} [Corán 28:79], y: {Y quienes fueron agraciados con el conocimiento dijeron: ¡Ay de vosotros! La recompensa de Al-lah para quien crea y obre rectamente será mejor, pero sólo la obtendrán quienes hayan sido perseverantes.} [Corán 28:80] La primera es la visión que tienen los débiles en la creencia en Al-lah, y la segunda es la de los que confían totalmente en su Creador.
· La realidad de esta vida:
Éste mundo es impredecible: un día todo está bien, pero al otro todo cambia. Él ser humano se deja llevar por la vanidad durante los días dorados, al punto que piensa que nadie puede llegar a la posición que ha alcanzado y que perdurará hasta la eternidad; y se olvida que su forma de pensar lo llevará a su perdición y hará que Al-lah le Quite todo lo que le Ha Permitido lograr. Dice el Altísimo (lo que se interpreta en español): {Por cierto que la vida mundanal es como el agua que Hacemos descender del cielo, con la que se irrigan los cultivos de la tierra, de los cuales se alimentan los hombres y los animales. Cuando los frutos maduran, la tierra se embellece, y piensan los hombres que pueden disponer de ella; entonces, Arrasamos los cultivos de noche o de día, devastando la tierra como si no hubiera sido cultivada. Así aclaramos los signos para quienes reflexionan.} [Corán 10:24]
· La incapacidad del hombre:
Hace unos pocos años nada más, los economistas alrededor del mundo auguraban que los años venideros, después del 2008, iban a ser los años dorados de la economía mundial, basados en cálculos sacados de programas especializados en la materia, pensando que habían logrado alcanzar descifrar el secreto del conocimiento de lo oculto y el más allá, y que podían, de ahora en adelante, pronosticar el futuro sin fallar. La realidad contradijo todas sus suposiciones: en vez de ser la mejor época que haya vivido la humanidad, ha sido la peor que haya registrado la historia. Su orgullo los llevó a rechazar las advertencias de algunos de sus compañeros, a los que llamaron pesimistas e ilusos.